Padres e hijos otakus
Por Hideki
Después de una jornada pesada de la escuela, ansió llegar a mi casa, sentarme frente a la televisión y adentrarme en un anime.
No sé cual elegir….harem?, shonen?, shojo? Aaaaa, esto es una decisión algo difícil. Pero que veo? Love Hina!!!!!! Si este veré hoy ya que hace mucho que no lo veía.
Antes que nada voy a prepararme unas palomitas y un refresquito para disfrutar al máximo de este magnífico anime. Ya instalado en mi cómodo sillón, elijo un capitulo al azar y la magia comienza. Desde el opening comienzo a reír, y no se diga cuando el capitulo esta en progreso, la risa simplemente no puede parar.
En eso llega mi querida Okaa-san, “okairi nasai mami, como te fue?” la saludo. “Me fue bien. Ya estás viendo tus monos ojones otra vez? Mira nada más!!!! Esa esta ensenando los calzones, estás viendo algo porno verdad?. Quita eso” termina de gritar.
Cabizbajo me dirijo a mi cuarto y me recuesto abrazando mi cojín de Shinku (regalo hecho por mi novia linda), sin entender el por qué de la reacción de mi mami. “No tiene nada de malo, en la TV se pueden ver peores cosas y nadie dice nada” es lo que concluyo.
En nuestra vida, los otakus escuchamos mil y un comentarios negativos en contra de nuestra forma de vida y sinceramente no nos importa lo que digan los demás, pero que sucede cuando esos comentarios vienen de nuestros padres?. Muchos tal vez no les hagan caso, pero en mi caso tengo escucho lo que me dicen aunque a veces confunden lo que en realidad el anime quiere demostrar.
Bien es cierto que existe el hentai, y lamentablemente la gente cree que eso es todo el anime y es cuando algunos padres de otakus les prohíben ver anime sin importar las mil y un explicaciones que les den.
Afortunadamente, en mi caso especial, mis papis son comprensivos e incluso algunas o más bien la mayoría de las veces han compartido más de un capitulo conmigo. De hecho, mi papi no podía quedarse dormido las mañanas de los sábados porque tenía que ver las aventuras de Saint Seiya. Mi mami me llevo una semana completa al cine a ver la primer película de Saint Seiya.
Solo a veces llegan a confundir un poco de fan service con mega pornografía y depravación, pero aun asi hay veces que hasta mi papi se emociona al ver a los caballeros de bronce derrotando a cualquier enemigo que se les presente, logrando asi una convivencia familiar disfrutando un buen anime y para mí eso es muy importante ya que se dan el tiempo para conocer la vida que he decidido llevar, una vida de otaku…
Pues eso es común en al vida de todo otaku. Yo pasé por ello. ¿Y al final? Me sigue gustando el anime y el manga, mis papás lo entienden y es que gracias a a esta afición, estoy en mi carrera a la que cual amo, simplemente hay que hablar con ellos, mostrarles que el anime y el manga no es pornografía o satanismo. Si tan solo los papás quisieran compartir la afición, tal vez hasta a ellos les guste o cambien su percepción.
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