Martes de Fan fics

Como ya es una costumbre en nuestro blog, aca les dejamos el siguiente capitulo de esta interesante historia de inuyasha como un estudiante por la gran escritora ashita chan, saludos y a disfrutar lo que sigue:

CAPÍTULO 16
LA PUERTA MISTERIOSA

Kikyo y Kagome entraron y vieron una extraña máquina succionando un líquido rojo. Y al frente de la máquina se encontraba Inuyasha.

Kagome y Kikyo le preguntaron a Inuyasha que estaba haciendo ahí, y el les dijo que todo era culpa del padre de Kikyo.

Tu padre tiene la culpa que yo me encuentre en este lugar.
No entiendo nada le dijo Kikyo ¿Que tiene que ver mi padre?
Bueno Kikyo ya es hora que te cuente y a ti también Kagome.

Recuerdan el día en el que estamos en tu fiesta Kikyo?

Si dijo Kikyo.

Ese día yo salí de la fiesta un poco triste porque tú Kagome, me estabas rechazando.

¿Quién yo? Dijo Kagome haciéndose la inocente…

Bueno la verdad es que soy un poco tímida y por cierto yo te quería pedir disculpas por mi actitud, pienso que fue una forma muy infantil de comportarme.

Acepto tus disculpas dice Inuyasha…

Bueno y continuando con la historia, dice Inuyasha..

Después de que me fui de la fiesta me encontré con tu padre, Kikyo.

El venía de su trabajo... se veía cansado….

El se acerco a mí y me dijo que necesitaba ayuda y luego se desmayo.

No yo sabía que hacer, además tampoco sabía quién era. Por lo que mire en sus papeles y vi que se llamaba Naraku y luego vi unas fotos tuyas… Le dijo a Kikyo.

Por lo que supuse que era tu padre...

Estaba muy angustiado así que decide llevarlo a la clínica mas cercana, me costo mucho trabajo llevarlo. Tuve que cargarlo hasta la clínica…

Al llegar busqué a alguien que me pudiera ayudar… grité….

¡Auxilio ¡ ¡ Tengo un hombre que necesita ayuda!
Pero nadie parecía responder ..Hasta que después de unos 15 minutos apareció un joven con cabello blanco y me dijo que colocara al paciente en una camilla. Que el se encargaría de cuidarlo ..

Yo no le vi ningún problema e hice lo que me pidió el joven.

Pero para asegurarme que tu padre iba a estar bien decidí quedarme hasta el otro día en la clínica.
Al amanecer decidí llamar a tu casa para avisarte, pero estaba ocupado tu teléfono.
Te llamé hasta el otro día porque no quería preocuparte antes de tiempo.
No sabía que hacer, me sentía un poco culpable por no poder avisarte. Así que decidí entonces preguntar como había amanecido tu padre. Pero por una extraña razón no me quisieron decir nada. Solo me dijeron que regresara al otro día.
A mí se me hizo muy sospechoso así que averigüé en que cuarto se encontraba tu padre, y me deslicé por una puerta y vi a tu padre.

Estaba conectado con numerosos cables, tenía una cámara de oxigeno, pero lo que mas me causo curiosidad era que además tenía una máquina que succionaba su sangre.
La miré cuidadosamente y me dio por tocarla.
En eso entró una enfermera y me sorprendió mirando la extraña máquina.

Me dijo que me fuera, que yo no debería estar en ese lugar.

Además me acuso de hacerle daño al paciente.

Yo le respondí que era mí deber saber de la salud del paciente, que para algo yo lo había traído a esa clínica.
La enfermera me sacó del cuarto.

Continuara.......